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Proyecto ‘Desembalse’: el impacto ambiental del vaciado de una presa en Navarra

El embalse de Enobieta, en Navarra, tiene los días contados. Su desmantelamiento ya ha comenzado y está previsto que termine a lo largo del próximo año. ¿Qué impacto puede tener este proceso sobre el medio ambiente? A través del proyecto “Desembalse” -impulsado por una de las Ayudas a Equipos de Investigación Científica en Ecología y Biología de la Conservación concedidas en 2017 por la Fundación BBVA-, un equipo de científicos de la Universidad del País Vasco (UPV) está analizando sus posibles efectos ecológicos.

19 julio, 2018

Ayudas a Equipos de Investigación Científica en Ecología y Biología de la Conservación 2017

Proyecto DESEMBALSE

Ficha

“A pesar de su utilidad para los humanos, los embalses causan graves impactos ambientales: transforman el hábitat fluvial, anegan las riberas, retienen los sedimentos que transporta el río, modifican la calidad del agua e impiden el libre movimiento de peces, entre otros efectos”, explica Arturo Elosegi, investigador principal del proyecto. En el caso del embalse de Enobieta, la presa se construyó en el valle de Artikutza, uno de los parajes naturales mejor conservados de la cornisa cantábrica, con bosques que albergan una enorme biodiversidad.

Muchos embalses construidos durante el siglo XX están siendo vaciados, dado que por el envejecimiento de sus materiales, como en el caso de la presa de Enobieta, ya no son seguros o útiles. En estos momentos, según señala Elosegi, todavía no hay suficiente información sobre los efectos ambientales de esta actividad, y de ahí la importancia de los resultados que puedan obtenerse con el proyecto “Desembalse”.

“Tenemos una serie de puntos aguas arriba, aguas abajo del embalse y también en ríos que no están afectados por el embalse que utilizamos como controles, y llevamos un año estudiándolos antes del vaciado. Los vamos a estudiar también durante y después la fase del vaciado para analizar sus efectos”, explica Elosegi.

Los investigadores están analizando el posible impacto del vaciado sobre la biodiversidad del entorno, como explica Aitor Larrañaga, profesor de Ecología en UPV y miembro del equipo de investigación: “En este momento tenemos unos invertebrados que sí son sensibles a la carencia de oxígeno, por ejemplo, y lo que queremos ver es si desaparecen o no a causa del vaciado del embalse”.

Biel Obrador, biólogo y profesor de la Universidad de Barcelona, es otro de los integrantes del equipo de investigación apoyado por la Fundación BBVA. Su trabajo se centra en examinar el sedimento del embalse, para comprobar el impacto potencial del vaciado sobre la emisión de los gases responsables del cambio climático: “Lo que hacemos es cuantificar por metro cuadrado de embalse qué cantidad de gases de efecto invernadero se está emitiendo”.

Los resultados del proyecto Desembalse servirán para intentar minimizar el impacto medioambiental de procesos como este que seguro se repetirán a lo largo de nuestra geografía. España es uno de los países con mayor número de presas del mundo y muchas de ellas, como la de Enobieta, ya han completado su ciclo vital.